lunes, 23 de julio de 2012

Indefensión aprendida, un esfuerzo diario

El concepto "indefensión aprendida" hace referencia a la sensación de pérdida de control sobre el entorno que nos rodea. Surgió de las investigaciones de Martin E. P. Seligman con perros a los que sometía a descargas eléctricas.
Algunos de estos perros tenían la posibilidad de cortar las descargas con algún tipo de mecanismo mecánico (palanca o similar) y enseguida aprendían a hacerlo. El otro grupo no podía escapar de las descargas hiciese lo que hiciese. Sometidos ambos grupos a nuevos experimentos en los que ambos tenían esta vez la posibilidad de evitar las descargas mediante otro dispositivo, sólo el primer grupo gaprendía esta nueva forma de escape. El segundo grupo se limitaba a mostrar una conducta totalmente pasiva.

La teoría de la indefensión aprendida se utiliza en psicología para explicar fenómenos como la depresión, pero también en otras áreas como la psicología social para explicar comportamientos que todos podemos fácilmente identificar en personas o colectivos que no habiendo tenido éxito en el pasado, pierden la capacidad de seguir intentándolo en el futuro. "¡Bah, si total! para qué intentarlo?". Ese negativismo es muy pernicioso y sólo conduce a la inacción y al "status quo", además de borrar cualqueir atisbo de diferenciación o espíritu emprendedor, tan necesario para mejorar cualquier cosa. 

La parte positiva es que había un porcentaje de perros en el experimento de Seligman que sí conseguía superar la situación a pesar de todo. La clave está en tener la capacidad de no dejarse influenciar por el resultado de experiencias pasadas, considerar cada experiencia como nueva y actuar en consecuencia. La vida no son problemas matemáticos que una vez eliminadas algunas variables, se consiguen reducir al supuesto anterior. Cada mañana es un nuevo comienzo y lo que no nos salió ayer, nos puede fácilmente salir hoy, así que ¡debemos seguir intentándolo!


No hay comentarios:

Publicar un comentario